Cielo de Guadalajara. Jueves primera hora de la mañana...un Arco Iris, algo importante que me anunciaba...Ultimamente mi blog se centra en la Vida, pero no puedo evitarlo es lo más grande lo más auténtico lo único nuestro y es en lo que - por lo que ocurre pienso -
Esta mañana , alumnos, profesores y hermanas se unieron en oración. Ha fallecido Gabriela, Capri para sus hermanas de comunidad. Para vosotros que no la conocéis es difícil retratárosla en pocas palabras.
Gabriela era una monja hermana de la Caridad de Santa Ana que lo dejó todo para irse de misionera a Africa, que estuvo en Mugina, en el Congo y 20 años en Ruanda. Que en sus primeros años como Hermana con a penas 23-24 años dio clases en el colegio donde yo trabajo. Todos la recuerdan, por la dulzura y paz que transmitía, por hablar desde el silencio. Por su alegría.
Se fue de misiones, arriesgó muchas veces su vida por los que ella verdaderamente creía sus hermanos. Enfermó de Cáncer, la operaron pero pidió regresar a Ruanda. Le dijeron que no se retrasase en la revisión de los 6 meses...pero Gabriela decidió gastarse en los demás, y pasaron, 4, 6 meses y mucho más. Cuando Gabriela fue al médico había demasiada metástasis y tuvo que regresar para sólamente dejarse cuidar. Así la conocí yo. Sonriente en el colegio aún con la enfermedad, luchando esa guerra mientras nos transmitía paz. Ayer decidió marchar.
Un misterio, un milagro, una Vida de las que me hace pensar.
Han sido momentos de sentirme unida a la Comunidad de Hermanas con las que trabajo, a los porfesores, a la Humanidad...preparé una oración que se leyó por la mañana. También al despertar me surgieron versos para Gabriela. Los cuelgo aquí...son para ella.
A penas está amaneciendo
Nace el día
Un arco iris lo deja claro
Fiesta en el cielo
Hoy se celebra una llegada
Que sólo en Tierra
Es despedida...
Brilla su luz
En nueva lámpara que queda hoy
¡Siempre encendida!
Una pequeña, humilde sierva
de nuestro Dios
tiene reunidos
Pueblos del mundo
En oración
Que hace familia
Toda ternura, todo detalle
dedicación
¡Cuánta dulzura!
De un alma joven
Que por amor
Gastó su vida
Un testimonio de caridad,
De una misión...con valentía
Del ofrecer coraje y fe
En el dolor con alegría
Suena el rosario
Y sus misterios traen al recuerdo
La Antorcha Viva
De tu elegida
En el final, junto a tu gente
Termina el día
El grano muere
¡Fiesta en el cielo!
Gabriela llega
¡Verdadera Eucaristía!
