
Me debo estar haciendo vieja, ...o quizá el caso es que ahora comienzo a valorar más lo vivido y en los días que estoy demasiado cansada como para escribir, hacer, componer... los dedico a contemplar, a recordar y revivir lo pasado.
Echar la vista atrás me ayuda a comprender mi presente y soñar con un futuro que deseo ir construyendo desde hoy.
Y , quizá por ello, os lo reconozco me dejé vencer por la añoranza y me fuí directa a a abrir mi caja de tesoros:.
Es una pequeña caja que de niña escondía debajo de mi radiador, detrás de la cama. En los momentos duros, cuando me despertaba en mitad de la noche con miedo, o sentía la necesidad de un abrazo eterno o deseaba desde dentro y con fuerzas que me crecieran alas para escapar tras la ventana, ...me deslizaba al hueco de detrás de mi cama, apoyaba (sobretodo si era invierno) mi espalda sobre el radiador y con cierto aire furtivo abría mi caja. Ello me calmaba. Recuerdo a recuerdo iba (re-)descubriendo los rastros de gente que me quiere y a quien quiero, me hacía darme cuenta de que me acompañaban y con ellos remontaba.
Esa caja se vino conmigo cuando me marché de casa y aquí sigue...incluso a veces cuando la cierro y vuelvo a esconderla siento miedo, creo que si la perdiese, gran parte de mi se iría con ella.
Echar la vista atrás me ayuda a comprender mi presente y soñar con un futuro que deseo ir construyendo desde hoy.
Y , quizá por ello, os lo reconozco me dejé vencer por la añoranza y me fuí directa a a abrir mi caja de tesoros:.
Es una pequeña caja que de niña escondía debajo de mi radiador, detrás de la cama. En los momentos duros, cuando me despertaba en mitad de la noche con miedo, o sentía la necesidad de un abrazo eterno o deseaba desde dentro y con fuerzas que me crecieran alas para escapar tras la ventana, ...me deslizaba al hueco de detrás de mi cama, apoyaba (sobretodo si era invierno) mi espalda sobre el radiador y con cierto aire furtivo abría mi caja. Ello me calmaba. Recuerdo a recuerdo iba (re-)descubriendo los rastros de gente que me quiere y a quien quiero, me hacía darme cuenta de que me acompañaban y con ellos remontaba.
Esa caja se vino conmigo cuando me marché de casa y aquí sigue...incluso a veces cuando la cierro y vuelvo a esconderla siento miedo, creo que si la perdiese, gran parte de mi se iría con ella.
Unido a este impulso nostálgico decidí también echar mano a mis escritos, releer los ensayos , poesías y crónicas autobiográficas de otros años. Cuanta vida entre las manos...
Hoy estreno mirada sobre ellos ...trato de no juzgarlos simplemente de reconocerme en sus palabras, y escuchar... traen recuerdos, aromas, sentimientos que me han atravesado, que aunque se han ido distanciando con el tiempo de mis pasos, me siguen discretamente y se suman siempre a "donde llego a ser"
Por eso he pensado en dedicarme un espacio también para archivar recuerdos, mi equipaje, todo aquello que he traído hasta aquí y que al fin del al cabo soy yo; de ahí la entrada anterior de "Recuerdos" como la introducción a otro espacio que me dedico simplemente para no olvidar todo aquello que es parte de mi, que escribí en otros momentos de mi historia, que encerraba en papel y ahora decido ir traduciendo a electrónica en mis ratos libres.
He decidido dejarlos tal cual, respetar tal y como estuviesen escritos en su momento, así que si alguno de vosotros decide acceder a ellos, entenderlos como lo que son, testigos de mi pasado, de mi infancia, adolescencia, camino hacia la adultez...
Como siempre estáis invitados a ese espacio, allí encontraréis mucho de lo qeu fui y entenderéis mejor lo que ahora soy y lo que con tanta fuerzas deseo llegar a ser.
Dedicado a todos vosotros que como parte de mi recuerdo, sois parte Viva de lo que soy, formáis parte de mi y agradecida os quiero.
Carmen
(http://lamatanemrakrecuerdos.blogspot.com/, aún no he empezado a pasar escritos, pero ya os adelanto la dirección)