viernes, 29 de mayo de 2009

QUE POR MAYO ERA POR MAYO...








Mayo se termina como comenzó con flores y fiesta a María en el colegio, con canciones con buenas noticias, con calor y pequeños grandes pasos por la vida.
El balance del mes me trae muy buenos recuerdos.
La infancia Misionera, el 26 cumpleaños, la confirmación del expediente de adopción para hermanos...
La obra de la buhardilla por fín terminada,

hasta Guadalajara ha cobrado un nuevo sentido para mí y comienzo a sentirme parte de ella. Este mes se organizaba en Guadalajara un ciclo de conferencias sobre María, realizando una cada jueves. Para mi sorpresa uno de los ponentes invitados era mi padre.
Acudí y por mucho que escribiese sobre ella no alcanzaría a reflejar lo feliz que me hizo sentir escuchar a mi padre. Fue un verdadero regalo de la Virgen. Todo fue increible: la cantidad de gente que al terminar me felicitaba como hija, sus comentarios sinceros a mi padre diciéndole que había sido la mejor charla meditación de todas las que habían organizado, la emoción de ver que hasta monjas del colegio acudieron a escucharle...Sus palabras...No fue una conferencia teórica, ni un estudio mariológico sino el testimonio de un hombre (mi padre) hablando como hijo y hermano de todos. Nos hizo sentir familia. El acto fue como la conversación de un amigo o hermano al que te encuentras después de mucho tiempo y empieza a contarte cómo ha estado todo este tiempo y cuál ha sido su camino.





No sé si mi padre me acercaba a la Virgen o la Virgen me acercaba a mi padre.





Todavía lo recuerdo y se me hace algodón el corazón (sé que la expresión es extraña pero es un poco lo que me ocurre cuando me emociono).

¡Gracias Dios por estos regalos con los que -en palabras que utilizó mi padre- nos llevamos el cielo puesto!

También en el cole ha habido actos destacados, esta semana ha sido la excursión de fin de curso. Me lo pasé genial. Fuimos a cercedilla donde hay un parque de multiaventura. ¡Quién me iba a decir que a estas alturas iba a poder tirarme en tirolina, lanzarme en lianas y escalar! Si los chicos disfrutaron, la profe ni te cuento. Vamos que llegué a casa y seguía tan llena de emoción que no había quien me durmiese. Desde luego que repetiría. Lo más gracioso es que justo ese día mientras yo me descolgaba por los árboles Emilio hacía un curso de prevención de incendios con los bomberos. Para habernos visto a los dos. Él apagando fuegos a manguerazo limpio y con extintores de todos los tipos y yo aprovechando la excursión para hacer el loco y soltar adrenalina jejeje. Menuda parejita. De Emilio no hay fotos, mías a ver si cuelgo alguna.
















Ahora toca ir a por el fin de semana: cena del viernes, piscina del sábado y concierto el Domingo. Además va a ser la fiesta de Pentecostés. Alegría grande para todos!!

1Vamos a por ella!!!