¿Verdadero o falso que me he pasado el día picando piedras?...
Bueno, pues va a ser cierto que así, tanto Emilio como yo, hemos estrenado Mayo.
Hicimos una pequeña obra en el jardín poniendo hormigón impreso al rededor de la piscina para después colocar una valla que la proteja por si nos visitan pequeñajos algún día. El caso es que los albañiles no se dieron cuenta de cuidar que la tapa de la depuradora pudiese abrise y cuando se secó...no había manera de levantarla. Pero como una vez que les has pagado es casi misión imposible hacerles regresar para retocar los desperfectos, nos hemos dedicado a soltar adrenalina cargados de martillo y destornilladores.
A golpecitos y con un pequeño descanso para comer se nos ha pasado el día. Ha sido muy diferente de las actividades de trabajado de la semana así que para despejar la mente no ha estado nada mal. Eso sí algún golpe de martillo fuera de sitio nos ha dejado las manos algo castigadas.

Hacía tiempo que no escribía en el blog, o al menos así me lo parece. Estoy con tanto jaleo en el colegio que cuando llego a casa caigo rendida. De hecho me voy a porponer no trabajar los fines de semana en temas de informes y proyectos porque al final siempre me acabo liando y me da la sensación de que estoy descuidando a Emilio y nuestro matrimonio.

Puedo contaros que a Emilio le ha dado por investigar de sus antepasados y se pasa el día contactando con primos y familia extensa para ver hasta donde llega en su árbol genealógico. Es divertido ver los "falsos intentos" de llamadas (analizada la guía telefónica) y me impresiona y nos emociona como ha logrado contactar con familia suya que está en Cuba, por lo visto un tío abuelo que se marchó de polizón en un barco llegó hasta Ciego de Avila y Emilio tiene primas allí con quienes se está poniendo al día a basa de mails.

Parece que el viaje a Tierra Santa va para adelante, y yo tengo unas ganas inmensas de ir allí. Es un gran premio. Lo único será el calor, porque en Jerusalén en el mes de Julio...buff,,en fín que aún con eso no me lo perdería por nada del mundo

Mis hermanos están bien. Me encantó tener a Pedro en casa unos días (aún conservo sin quitar algunos de los post-it que me dejó con sus comentarios), a PAblo espero verle mañana igual que a Juan, que por cierto ha presentando un proyecto de su programa "El buitre mediático" (que hasta ahora manejaba en internet) a televisión y creo que en Intereconomía lo van a emitir, al menos tres capítulos piloto ¡Qué emoción!

Mi coche está enfermito, no arranca, así que a día de hoy me toca madrugar y Emilio y yo vamos y volvemos juntos a casa. Es algo más cansado pero habrá que verlo por el lado romático.

En el colegio es un no parar. No sé si el año que viene querrán que haga lo mismo, porque aunque me encanta a veces me da la sensación de que no puedo realizar algunas cosas con la calidad que requerirían por falta de tiempo. La semana que viene celebramos la jubilación de una hermana que lleva 50 años de monja y es una de esas personas que desde la máxima sencillez y la entrega total va cambiando las vidas de la gente con la que está a mejor. La vamos a echar de menos todos y los niños los que más

Le he recogido en un albúm dedicatorias de los alumnos a los que ha ayudado y le escribí una poesía, espero que le guste. El miércoles será la sorpresa.

Mañana día de la madre y también 2 mayo, cumplo 27. Como pasa el tiempo, me hago mayor y empieza a costarme cumplir años porque me da la sensación de que he malgastado los que ya han pasado y no he logrado nada importante, no he querido tanto como hubiese podido y no me he atrevido a cambiar esas cosas que me impiden crecer. Con todo me gustarí levantarme llena de gratitud, porque he recibido mucho. Hoy me encuentro cansada (¿Será por las piedras?) y me vienen a la mente más mis tropiezos que las grandes cosas que tengo para sonreir.

Me gustaría pedir de regalo que fuera más capaz de amar, de alegrarme de las pequeñas cosas, de pensar menos en mí misma y de no buscar, no pedir, no necesitar...sólo vivir . Me gustaría querer quererlo así.

Me voy a descansar.
Dios os bendiga!